Personalidad del tipo de sangre 0 positivo
La clasificación de la sangre según su tipo ayuda a prevenir reacciones cuando alguien recibe una transfusión de sangre. Los glóbulos rojos tienen marcadores en su superficie que caracterizan el tipo de célula. Estos marcadores (también llamados antígenos) son proteínas y azúcares que nuestro cuerpo utiliza para identificar las células sanguíneas como pertenecientes a nosotros.
Tener cualquiera de estos marcadores (o ninguno) no hace que la sangre de una persona sea más sana o más fuerte. Es sólo una diferencia genética, como tener los ojos verdes en lugar de azules o el pelo liso en lugar de rizado.
El sistema inmunitario es la protección del cuerpo contra los invasores. Puede identificar los antígenos como propios o ajenos. Para recibir una transfusión de sangre de forma segura, el sistema inmunitario de una persona debe reconocer las células del donante como compatibles con sus propias células. Si no se reconoce la compatibilidad, las células son rechazadas.
El sistema inmunitario fabrica unas proteínas denominadas anticuerpos que actúan como protectores si entran células extrañas en el organismo. Dependiendo del tipo de sangre que tenga una persona, el sistema inmunitario fabricará anticuerpos para reaccionar contra otros tipos de sangre.
Tipo de sangre más raro
Antes de que se descubrieran los tipos de sangre en 1901, la gente recibía transfusiones de sangre independientemente del tipo de sangre. Estas transfusiones eran la causa de muchas muertes debido a las incompatibilidades. Hemos avanzado mucho desde 1901. La investigación y el conocimiento de la compatibilidad de los tipos de sangre protegen hoy a los pacientes de las reacciones adversas.
Los últimos estudios han demostrado que en Estados Unidos alguien necesita una transfusión de sangre cada 2 segundos cada día. La persona media sólo puede donar 1 pinta de sangre entera en una sola donación y la vida útil es de 42 días, por lo que la necesidad de seguir reponiendo el suministro para satisfacer la demanda es grande.
Tipos de sangre
Aunque se utilizan varios sistemas de grupos sanguíneos para clasificar la sangre, el ABO es el más importante. Su tipo ABO se basa en la presencia o ausencia de dos antígenos (A y B) en la superficie de los glóbulos rojos. Hay cuatro tipos ABO: A, B, AB y O.
Cada uno de estos ocho tipos es único. Los tipos de sangre determinan a quién se puede donar y recibir sangre. El tipo de donación más adecuado para usted viene determinado por su tipo de sangre, así como por la necesidad del paciente. Lea más para saber qué hace que su tipo de sangre sea especial:
NUESTRA MISIÓN: Lideramos los campos de la medicina de transfusión y trasplante mediante el avance de la ciencia y la tecnología. Proporcionamos esperanza para el futuro enseñando a los líderes médicos del mañana. Mejoramos vidas conectando a los donantes con los pacientes cada día.
Sangre o negativo
En algunas emergencias, es posible que no haya donantes del mismo grupo sanguíneo que el paciente. En estos casos, una persona del grupo O, concretamente O negativo, puede donar sangre al paciente. Este grupo sanguíneo apenas provoca reacciones en el receptor y se denomina grupo sanguíneo de donante universal.
Aunque las personas del grupo sanguíneo O se conocen comúnmente como donantes universales de sangre, las personas del grupo sanguíneo O (negativo) son los verdaderos donantes universales. Esto se debe a que sus glóbulos rojos no son portadores de antígenos. Por tanto, pueden donar sangre a cualquier otro grupo sanguíneo. Una persona del grupo sanguíneo O+ (células positivas) no puede donar sangre a un individuo Rh negativo.
El grupo sanguíneo O (positivo y negativo) tiene una gran demanda debido a su necesidad durante las emergencias. Sin embargo, alrededor del 7% de las personas tienen un grupo sanguíneo O-negativo, y alrededor del 37% de la población tiene un grupo sanguíneo O-positivo, lo que lo convierte en un grupo sanguíneo común.
Los grupos sanguíneos se determinan por la presencia y ausencia de antígenos en la sangre. El antígeno ayuda a desencadenar el sistema inmunitario si algún cuerpo extraño entra en el torrente sanguíneo y produce anticuerpos para combatirlo.